Acciones que haces a diario y ponen en riesgo la seguridad de tus datos personales

¿Sabrías calcular los peligros que existen en Internet? Complicado, ¿verdad? Son innumerables. Sin embargo, muchos de ellos, la mayoría, se podrían evitar siendo usuarios conscientes. A diario realizamos, de manera involuntaria, acciones que ponen en riesgo la seguridad de nuestros datos personales. Esta semana celebramos el Día Internacional de Internet Seguro y por ello vamos a repasar las cinco acciones más comunes que realizamos a diario que exponen la seguridad de nuestros datos.

Navegar por páginas webs no seguras

Es una de las acciones más comunes: navegar por páginas webs no seguras. ¿Por qué no hacerlo? Pues porque cada vez son más las que están infectadas por algún malware y los cibercriminales se aprovechan del desconocimiento y falta de precaución de los usuarios. La suplantación de identidad para conseguir los datos personales de un usuario en webs de ecommerce creció por encima del 233% en noviembre de 2019. Es recomendable comprobar siempre el protocolo de seguridad https. Si la URL no incluye la -s al final, esa web no ofrece altos estándares de protección.

Descargar aplicaciones sin comprobar su legitimidad

Así mismo ponemos en riesgo nuestros datos al descargar aplicaciones sin comprobar su legitimidad y aceptar sus condiciones de uso sin haberlas leído. Esta acción hace que quedemos expuestos a cualquier vulnerabilidad de la aplicación. Uno de los ejemplos más recientes de este tipo de vulnerabilidades se produjo a mediados de diciembre, cuando un fallo en WhatsApp permitió a los cibercriminales bloquear la app e impedir que los usuarios la utilizaran a través del envío de un mensaje malicioso a un chat grupal. Además, al aceptar los términos y condiciones de las aplicaciones sin leerlos, el usuario puede perder el control sobre los datos personales que recoge dicha app.

Omitir las actualizaciones

Obviar las actualizaciones es otra de las malas prácticas que realizamos habitualmente. Todos aquellos usuarios que consideran que las actualizaciones son molestas y hacen caso omiso de los mensajes de advertencia ponen en riesgo la seguridad de sus datos. Por lo general, las actualizaciones incorporan nuevos parches de seguridad que aumentan los niveles de protección frente a las vulnerabilidades.

Usar el mismo usuario y contraseña para todo

Posiblemente el hábito más repetido sea utilizar el mismo usuario y contraseña para crear perfiles en distintos servicios. En consecuencia, los cibercriminales pueden descifrar nuestras credenciales y acceder a todas nuestras redes sociales, correo electrónico y plataformas de vídeo en streaming, entre otras.

Dispositivos desprotegidos

Los dispositivos desprotegidos, en relación a la protección de los datos del usuario, son el último punto a tener muy en cuenta. Muchos usuarios pasan por alto el nivel de seguridad básico: tener una contraseña de acceso. Sin ella, en caso de robo o pérdida, cualquiera puede acceder a toda la información almacenada en el dispositivo. Para evitarlo recomendamos una contraseña robusta de al menos 8 caracteres, que intercale números, letras y signos de puntuación.

Recuerda que cualquier actividad relacionada con el mundo virtual puede convertirse en una amenaza para nuestra privacidad, por lo que tomar medidas preventivas es esencial para evitar que nuestros datos se vean expuestos.